¿Cómo ahorrar dinero si no tienes trabajo?

cómo ahorrar sin trabajar
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Imagina que tienes que estar sin ingresos durante un mes o incluso seis meses. ¿Te ves a ti mismo/a perdiendo tu apartamento y comiendo las sobras en el sofá de un amigo? ¿Podrías subsistir esos meses simplemente apretándote el cinturón y evitando comprar cualquier cosa que no sea absolutamente necesaria? O, ¿Podrías vivir una existencia relativamente normal posponiendo cualquier gasto extravagante? 

Cualquiera que sea la situación en la que estés ahora mismo, creo que estarás de acuerdo en que lo ideal sería ser capaz de sobrevivir algunos meses de forma austera sin tener que mudarte o vender la mayoría de tus posesiones. 

Incluso si tienes la esperanza de que esto nunca te ocurrirá a ti, todos conocemos a alguna persona que ha perdido su trabajo debido a mil razones distintas. 

Pero hay algunas veces en las cuales podrías preferir estar sin ingresos durante un período determinado. La maternidad y la paternidad es el gran período que a todos y todas nos viene a la mente rápidamente. A menos que tengas mucha suerte y tu empresa te pague la baja por maternidad o paternidad, puedes esperar que ese período no sea retribuido. O, podrías simplemente querer tomarte un tiempo sabático sin trabajar o dejar un trabajo que no te motive y tomarte un tiempo para pensar en tu siguiente movimiento. 

Tabla de contenidos

Estas situaciones son inimaginables si no has construido todavía unos fondos financieros apropiados. Incluso teniendo pocos fondos o ahorros, no solo podrás sobrevivir un período sin ingresos, sino que incluso podrías disfrutar ajustando tus gastos tanto como sea necesario. 

Entonces, ¿Qué tipo de fondos financieros o ahorros necesitas? Y, si necesitas recurrir a ellos, ¿Cuál es la mejor forma de hacerlo? 

Todo empieza con los fondos de emergencia

Esta situación es exactamente la razón por la que insisto tanto en la importancia de tener fondos de emergencia por encima de casi cualquier objetivo, ahorra pagar deudas con intereses muy altos. 

Estos ahorros pueden ser muy prácticos en situaciones como cuando se rompe algo como tu coche, lavadora, o cualquier otra cosa. Pero la posibilidad de perder tus ingresos es la gran razón por la que tener un fondo de emergencias. 

Aunque nunca es lo ideal, probablemente estarás bien si tienes que reparar tu coche o cualquier gasto imprevisto. Pero confiar en dinero prestado para superar un período prolongado sin ingresos es la receta perfecta para un desastre financiero. En la mejor de las situaciones, doblará o triplicará el impacto de la perdida de ingresos en tus finanzas. En la peor de las situaciones, podría sumergirte en un agujero que parecerá imposible de escapar. 

La habilidad de lidiar con la pérdida del trabajo es por la que no recomiendo ahorrar una cantidad de dinero fija como fondos de emergencia, es preferible una cantidad de dinero igual a varios meses de gastos. El valor de tres meses de gastos es tu objetivo mínimo, pero deberías finalmente llegar a tener seis meses ahorrados para gastos como fondos de emergencia. 

Un ingreso extra te ayudará también

Si hay otro tema en el que insisto casi tanto como en tener unos fondos de emergencia, es tener una segunda fuente de ingresos. Esto podría ser una propiedad alquilada que te esté produciendo ingresos o una inversión que te genere ingresos pasivos, pero mientras más joven seas, más probable será que no tengas estas opciones. 

Incluso con un trabajo a media jornada con un salario bajo te ayudará a suavizar la brecha en tus ingresos principales, pero estará aun mejor si tienes un trabajo independiente, o un negocio en el cual puedas tirar de una palanca para trabajar más y ganar más dinero cuando lo necesites. 

Por supuesto, si te estás tomando un tiempo libre de trabajar intencionalmente, tanto por razones sabáticas o parentales o por salud, podrías no querer trabajar en absoluto. Si tienes una segunda fuente de ingresos, será la situación perfecta para ti. Esto es menos común, por supuesto, y está bien. Esto significa que tendrás que confiar más en tus fondos de emergencia y otras opciones. 

Otras fuentes de ingresos

Si no tienes suficiente dinero en tus fondos de emergencia o esperas que tu ausencia de trabajo agote completamente tus ahorros de emergencia, puedes mirar otras cuentas de ahorros e inversiones, pero aquí es donde tendrás que ser extremadamente cuidadoso/a. 

En general, hay tres tipos de cuentas que podrías considerar tocar para cubrir gastos cuando estés sin ingresos: 

  • Otras cuentas de ahorros (cuentas de ahorro diseñadas para un objetivo específico). 
  • Fondos de inversión. 
  • Cuentas de jubilación (IRA). 

Otras cuentas de ahorros

Quizás tengas algo de dinero destinado para unas vacaciones, un coche nuevo, o la letra de una casa. Por supuesto, no querrás tocar esos ahorros destinados para una meta concreta hasta que estés preparado/a para sacar ese dinero explícitamente para esa meta, pero un período forzado sin ingresos es una excepción que merece la pena. Asumiendo que tu dinero está en una cuenta corriente y puede ser retirado sin penalizaciones, este sería el primer lugar para buscar recursos adicionales. 

Fondos de inversión

Asumamos, sin embargo, que tus ahorros adicionales están en acciones y bonos, o en fondos comunes que mantienes dentro de una cuenta de corretaje. Aunque puedes vender estas inversiones y sacar dinero sin penalización, haciendo esto podría tener consecuencias negativas. 

Lo primero es que podrías estar vendiendo la inversión mucho antes de lo que anticipaste, y posiblemente en pérdidas. Podrías querer intentar mantener la inversión todo lo que sea posible para aprovechar el crecimiento a largo plazo, así que lo mejor siempre es evitar estar forzado/a a la venta. 

Por otro lado, si vendes estas inversiones con beneficios, tendrás impuestos por los beneficios de cualquier ganancia capital (la diferencia entre por lo que vendiste la inversión y lo que pagaste por ella). Ese impuesto será más grande si has mantenido la inversión durante menos de un año, así que siempre vende tus inversiones si las has mantenido durante un año o más tiempo. 

Una opción que tienes con los fondos de inversión es que solo sustraes dividendos. Muchas inversiones pagan dividendos mensualmente, trimestralmente, o anualmente. Estos dividendos son o automáticamente reinvertidos o distribuidos en dinero en efectivo. Esto es algo que puedes fácilmente cambiar llamando a tu corredor de inversiones. Algunos dividendos tienen impuestos, pero gastar los dividendos primero puede ahorrarte vender las participaciones innecesariamente. Desafortunadamente, los dividendos anuales son un pequeño porcentaje del total de la inversión, así que no añadas demasiado a menos que tengas una buena cartera de inversiones. 

Si realmente necesitas el dinero, podrías tener que aceptar estas consecuencias y liquidar las inversiones, pero puedes ver porqué es una opción menos deseable que usar el efectivo en mano. 

Cuentas de jubilación

Hacer una retirada temprana de cualquier cuenta de jubilación es mala idea que incluso dudo mencionar. Sin embargo, es una idea a la que muchas personas acuden cuando necesitan dinero, así que quiero explicarte claramente porqué es tan mala idea. 

Antes de nada, el IRS impone una penalización automática en la mayoría de retiradas de una cuenta de jubilación. 

Por esto una retira temprana de una cuenta de jubilación anula el objetivo de la cuenta en sí. Ese dinero se deja en esas cuentas para tu seguridad financiera en tu vida del futuro. Cuando te hagas mayor, necesitarás ese dinero ya que no querrás trabajar más o posiblemente no seas capaz de hacerlo. 

El dinero en tu cuenta de jubilación es una inversión que irá agravándose durante muchas décadas. Ese agravante multiplicará tu contribución inicial. Extraer esos fondos prematuramente saboteará todo ese crecimiento futuro. 

Pedir dinero prestado

Como mencioné anteriormente, pedir dinero prestado para cubrir tus gastos durante un período prolongado sin ingresos debería ser tu último recurso. Deberías ser cauteloso/a al asumir una deuda incluso cuando tengas unos ingresos estables y saludables. Pedir dinero prestado sin unos ingresos o cuando no estás seguro/a acerca de cuando volverán tus ingresos es extremadamente peligroso. 

Si encuentras que no tienes otra opción, entonces, ten en cuenta lo siguiente: 

  • Las tarjetas de crédito nunca deberían ser tu opción principal para financiar tus gastos. Los ratios de intereses altos en las tarjetas de crédito y el hecho de que aportan una línea de crédito revolving que puedes usar siempre que quieras hace de las tarjetas de crédito que sean muy probables de sumergirte en una deuda que no podrás pagar.

  • Un préstamo personal o, si tienes tu propia casa, un préstamos con garantía hipotecaria, podría aportar unos ratios de intereses más bajos y vendrán con unos pagos mensuales fijados que puedes pagar a lo largo de un número de años previamente fijados. 

Cómo manejar tus finanzas durante un período prolongado sin trabajar

Ahora que hemos mirado a todos los fondos potenciales para tu ausencia de trabajo, hablemos sobre el manejo del dinero después de tu último salario. 

¿Cuánto dinero necesitarás?

Esta puede ser una pregunta engañosa de responder si no estás seguro/a de cuanto tiempo estarás sin trabajar, pero será un poco más fácil si sabes que estarás sin trabajar durante ocho semanas por motivos sabáticos o parentales. En cualquier caso, lo mejor es planear el peor escenario y estar agradablemente sorprendido/a si vuelves a trabajar antes de lo esperado. 

Si estimas que vas a estar un tiempo prolongado sin ingresos, no hay ninguna excusa. Absolutamente vas a necesitar una visión general de tus gastos. Mira el valor bancario de un año y el estado de tus tarjetas de crédito para capturar no solo tus gastos durante el último mes, sino también los gastos irregulares que ocurren con menos frecuencia. 

Busca hacer recortes fáciles

Todos y todas tenemos gastos que son claramente prescindibles. Ya sea alguna suscripción a Netflix o a cualquier otra plataforma digital. Sean cuales sean estos gastos córtalos o suspéndelos sin piedad. Con suerte, esto no debería ser demasiado difícil ya que puedes recordarte a ti mismo/a que es solo temporal. 

Mientras tu ausencia del trabajo sea temporal, puedes suspender tus contribuciones de ahorro para la jubilación y otros depósitos de ahorros. Si tienes préstamos o becas estudiantiles, también podrías llamar y solicitar un aplazamiento temporal. Ten en cuenta que los intereses continuarán acumulándose, así que si crees que puedes realizar tus pagos regularmente, esto es lo mejor que puedes hacer. 

Se realista con todo lo demás

Habrá otros gastos que no podrás eliminar con un email o una llamada de teléfono, pero podrás ser capaz de reducirlos. Comer fuera de casa es probablemente el mayor gasto. Cuando los tiempos son buenos, todos nosotros y nosotras salimos fuera y pedimos a domicilio sin pensarlo demasiado. Y esto crea un incremento en los gastos personales que se van añadiendo a los gastos mensuales. 

Puedes cortar tus hábitos de cenar fuera de casa. Aun así, es difícil de predecir cuanto. Se realista aquí. En esta etapa es mejor sobrestimar tus gastos que infravalorarlos y quedarte sin fondos. 

No te olvides de los gastos nuevos

Muchas personas mayores se aproximan a la jubilación con la esperanza de que gastarán menos dinero cuando dejen de trabajar. Sus hijos estarán grandes, no se tendrán que preocupar por el coste de los viajes al trabajo o los almuerzos del trabajo, y quizás tengan sus casas ya pagadas.

Pero no tienen en cuenta todas las formas nuevas que podrían querer gastar su dinero en su jubilación, mayormente en actividades y viajes. En algunos casos, estas personas podrían gastar su dinero para satisfacer el estilo de vida nuevo que quieren. 

Es posible que tengas este problema o no, pero es de especial preocupación si te tomas un tiempo libre para estar en casa con un nuevo bebé. ¡Los bebés son muy caros! Es posible que ya haya presupuestado pañales y fórmulas, pero dentro de cuatro o cinco semanas estará listo para comprar cualquier cosa que ayude a tu bebé a dormir para que tu también puedas hacerlo. Espera muchos gastos inesperados en esta etapa.

Planifica tus retiradas de dinero

Averigua la fecha y la cantidad de tu último salario y trabaja desde ahí. Si cobrabas mensualmente y manejabas tus ingresos de forma competente, será más fácil replicar ese salario organizando transferencias automáticas entre tus fondos de emergencias y tu cuenta corriente.

No transfieras todo el dinero a la vez, al hacer esto renunciarán a una pequeña cantidad de intereses que el dinero ganará mientras permanece en la cuenta de ahorros. 

¿Te has quedado sin trabajo recientemente? ¿Cuál método de ahorro es el que mejor encaja con tu estilo de vida? ¡Cuéntanos tu experiencia en los comentarios!

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